El odio genera más odio

“Esta es la historia de un hombre que cae de un piso 50. El tipo, mientras va cayendo se repite sin cesar para tranquilizarse Hasta ahora todo va bien, hasta ahora todo va bien… hasta ahora todo va bien. Pero lo importante no es la caída, sino el aterrizaje”

La película comienza con un movimiento de agitación social protagonizado por jóvenes franceses de Muguets, Chanteloup-les-Vignes, contra las fuerzas policiales. El motivo es el estado crítico en el que se encuentra Abdel Ichah, un joven árabe de 16 años, tras la paliza propinada en una comisaría de policía por parte de las fuerzas del orden. El revuelo social se disputa con Burnin’ and lootin’ de Bob Marley de fondo.

Tres jóvenes, los suburbios de París, un clima inestable. Mathieu Kassovitz es el director de “El Odio” (“La Haine” en francés del original), una película en blanco y negro que relata la difícil situación en la que se (sobre)vivía en los suburbios durante los años 90. La marginación social está representada por los tres protagonistas: Vinz, Said y Hubert, que simbolizan respectivamente la religión judía, la islámica y la raza negra. Tres perfiles característicos de la sociedad francesa empobrecida de los 90. Tres personas que van a luchar contra las injusticias sociales. Tres jóvenes ahogados en odio.

la haine vinz

Hubert: ¿Qué te enseñaron en la escuela? El odio genera odio.

Vinz: Y la calle me enseñó que si pones la otra mejilla te dan por detrás.

La agresividad, el inconformismo y la violencia están representadas en Vinz. De religión judía, es el personaje que desde el principio muestra el lado más radical de los jóvenes franceses de los suburbios. Siempre dispuesto a pelear por defender sus ideales, aunque esas revueltas no tengan nada que ver con él. Vinz necesita dar salida a su agresividad. Necesita llenar con odio el vacío que existe en su interior. La pistola que encuentra le acompañará a lo largo de las 24 horas que se desarrollan en la película. Un instrumento que le otorgará superioridad y una inconsciencia muy potenciada que relucirá en diversas escenas.

la haine said

El escepticismo reside en el personaje de Said, el joven árabe. Parece ser el único que acepta el modo de vida de los suburbios. Su felicidad aparente contrasta con el carácter y la actitud de sus dos amigos. A su vez, en Said se observa el único familiar que representa un modelo estable de vida: su hermano policía. Quizás por este motivo, no se interesa demasiado por formar parte de los disturbios y le es indiferente, de alguna manera, lo que sucede a su alrededor. Al mismo tiempo, Said destaca por apaciguar el carácter y las ideas radicales de Vinz. Sin duda, es un personaje con una indiferencia muy marcada con respecto a los jóvenes de su entorno.

la haine hubert

«L’avenir c’est nous». El futuro es nuestro.

Hubert es la yuxtaposición de Vinz. Ambos generan en su interior un odio hacia lo externo pero es en Vinz donde el odio a la policía es más notable. Hubert radicaliza tal sentimiento con el boxeo. Otro ámbito en el que se diferencian es en el respeto a las personas de autoridad o los mayores. Esta distinción se aprecia claramente en la relación que tiene Hubert con su familia, especialmente en la ayuda económica que le proporciona a su madre gracias a la venta de droga. Vinz no ayuda en casa y no tiene buena relación con su hermana pequeña. Gritos y represalias caracterizan el hogar judío mientras que en casa de Hubert hay un mayor clima de solidaridad.

la-haine

Racismo, discriminación, paro: la realidad de los suburbios de París en los años 90. Tres cuerpos que se arriesgan a morir, tres almas que luchan por crecer. Con un final de una crítica moral abrumadora, “El odio” se convierte en un referente del cine contemporáneo y transgresor. Una obra maestra en blanco y negro donde el inconformismo y la lucha por la vida se ven reflejadas con una esencia inteligente, directa y psicológica.